1. Martha C. Gómez 

Esta científica pereirana es considerada una autoridad mundial en clonación. Mediante su trabajo como investigadora en el Centro Audubon para la Investigación de Especies en Peligro de Extinción se convirtió en la primera persona en clonar un gato salvaje, y ha contribuido a avances en la investigación sobre biología reproductiva y comportamiento, así como en el desarrollo de métodos para mejorar la conservación genética de especies de animales raras.

A través de su propia compañía, Gómez se encuentra trabajando en la modificación genética para lograr crear un gato que no produzca alergias. También está interesada en la clonación del rinoceronte blanco, una especie en vía de extinción.

2. Rodolfo Llinás 


Rodolfo Llinás es una de las mentes colombianas más brillantes. Como investigador, este neurólogo colombiano nunca le ha temido a poner en duda paradigmas y llegar a conclusiones disruptivas. Es precisamente ese espíritu curioso el que le ha otorgado un lugar de honor en el campo de la investigación neurocientífica. De hecho, en 1989 enunció la Ley de Llinás o ley de la no intercambiabilidad, uno de sus máximos logros como investigador.

En noviembre de 2018, la Sociedad de Neurociencias de Estados Unidos le otorgó a Llinás el Premio W. Gerard por su “excelencia académica excepcional con un impacto impresionante en la neurociencia a lo largo de una larga y distinguida carrera”.

También ha recibido otros importantes reconocimientos como la Medalla de Oro Albert Einstein de la Unesco en 1991; el Premio Bernard Katz de la Sociedad de Biofísica, en 2011; y el IV Diploma Cajal otorgado por la Reina de España en 2013.

3. Jorge Reynolds 

Este investigador bogotano es uno de los científicos colombianos más importantes y una mente brillante que, gracias a su trabajo en medicina, ha logrado salvar la vida de millones de personas alrededor del mundo.

Reynolds es ingeniero electrónico y su trabajo en medicina lo motivó a investigar el corazón como un sistema eléctrico. Como resultado de este trabajo, en 1958, creó el primer marcapasos artificial del mundo.

En 2014, empezó a desarrollar una nueva versión del marcapasos artificial a partir de la nanotecnología. Aunque este invento aún está en fase experimental, significa un importante adelanto científico porque a diferencia del marcapasos de 1958. Según Reynolds,

No funciona con baterías, sino con la misma contracción del corazón

Entre los reconocimientos que ha recibido por su trabajo se destacan tres doctorados honoris causa en medicina, por sus aportes a la investigación y al desarrollo de tecnologías para la cardiología; el premio Manos de Colombiano en 2015; y el primer puesto en los Premios Evaluamos a la innovación TIC, en 2019.

El trabajo de estos científicos es un ejemplo más del talento colombiano que inspira cada día y que deja en alto el nombre del país en el mundo. Si quieres conocer por qué Colombia es un considerado un país de gente talentosa y apasionada.